lunes, 28 de febrero de 2011

Sueños en el embarazo

Mi hija, después del sustillo que nos dió el fin de semana pasado, está muy bien ahora. Vuelve a su rutina y a vuelto a dormir bien en su cama en su habitación otra vez, después de los días en que estuvo malita y durmió con papá y mamá ("no la metas en la camaaa!! ...que no la podrás sacar NUNCA!!!...jejeje)

La parte negativa de esto es que estoy soñando. A Sara la soñé una sola noche, soñé que era rubia y que se parecía al Miguel, y rubia es y se parece a su padre.

A Nuria la he soñado esta semana dos veces. Las dos veces es morena y se parece a las fotos de mi hermano cuando era bebé: pelo moreno, ojazos marrones con mucha pestaña. Ya veremos si también he acertado con el aspecto físico de la peque.

Del primer sueño apenas recuerdo nada más, pero el segundo sueño lo he tenido esta noche y ha sido muy angustioso. Sé que es muy típico soñar cosas horribles del bebé cuando estás embarazada, que hay quien sueña que da a luz gatitos en vez de un bebé y cosas así. Yo he soñado que mi hija tenía un enorme bulto en la espalda, grandísimo y alargado, como un tercer brazo. Y que no me dejaban tenerla conmigo, que pasaba de mano en mano, por enfermeros, médicos, abuelas...pero yo no la podía tener nunca. Objetivamente sé que no le he de dar más importancia, pero, la verdad, me he despertado con una desazón y unas ganas de llorar inmensas. Miguel además ya se había ido a trabajar, por lo que no me ha podido distraer con un rato de charla adulta.

Sólo se me ha quitado la angustia cuando Sara se ha despertado y la he visto caminando por el pasillo con el saco de dormir puesto (no sé como lo consigue, yo me caería seguro) y los bracitos adelante pidiéndome su abrazo de buenos días y su tetita de desayuno. Es imposible seguir angustiada por las sombras de la noche cuando mi hija sonríe. Pero espero no volver a tener esta clase de sueños, y es que muy a pesar mío soy un poco supersticiosa.

lunes, 21 de febrero de 2011

Mala racha


Llevo muchos días sin aparecer por aquí, os pido perdón. La verdad es que este mes de febrero ha sido un poco malo, porque Sara ha ido encadenando resfriados, catarros, colitis y virus varios.

Hemos visitado al pediatra por lo menos una vez por semana, ha habido semanas que más. Y ha habido veces que la verdad, yo me negaba a volver a llevarla para que me dijera lo mismo, si ya sabía lo que me iba a decir...

Mi niña que siempre ha sido tan fuerte y que tan poco acostumbrados nos tiene a ponerse malita, nos ha hecho sufrir un poquito. Sabemos que no ha tenido nada de cuidado, en verdad, pero eso de ver que no levanta cabeza, que no para de moquear, que la diarrea le ha durado semanas enteras, pues está siendo un poco durillo, sobretodo porque, como digo, prácticamente en sus 21 meses no había estado enfermita, y es una niña alegre que raramente se queja. Y ahora es una queja constante, "uhmmm" en tono plañidero es lo que más se oye en mi casa estos días.

Y el colofón vino el sábado pasado, que amanecimos a las siete de la mañana con 39.9ºC. Se la conseguimos bajar, pero por la tarde volvió a subirle a 38.5ºC cuando aún faltaba un rato para poder darle un antitérmico. Sé que podíamos haberla bañado en agua templada y que hay otros remedios para bajar la fiebre, pero visto el mes que llevamos, preferimos irnos al hospital y que nos la revisaran bien.

Queríamos descartar que el catarro este que no se le va estuviera enmascarando alguna otra cosa. Cuando le tomaron la temperatura volvía a estar a 39.8ºC (no habían pasado más de diez minutos). Así que allí estuvimos en observación unas cuantas horas, hasta que la temperatura de Sara fue de 37.2ºC cuando nos dieron el alta. Le hicieron un análisis de sangre y confirmaron el diagnóstico del pediatra de Sara de que se trataba de un cuadro viral. Así que por lo menos sabemos que no tiene nada peor, el virus hay que pasarlo y ya está.

Hoy Sara ya está mejor, aunque no ha terminado el tratamiento. Desde ayer no ha vuelto a tener fiebre, aunque ha perdido algo de apetito y también está durmiendo algo peor desde hace una semana. Espero que cuando se recupere de este virus ya vuelva a sus costumbres habituales de comida y sueño.

Que ganas tengo que se acabe este mes de febrero, a ver si marzo se presenta mejor...

miércoles, 2 de febrero de 2011

Núria



Esta es una de mis canciones favoritas de uno de los grupos musicales que más me gustan desde mi adolescencia. Es un grupo de Rock Català, quizás si no vivís en Catalunya no lo hayais oído nunca, ya que cantan en catalán. He escogido esta versión porque está subtitulada, aunque el sonido no sea el mejor, espero que os guste.

No habla de crianza ni de perros, es una canción de amor muy alegre, para variar. Con lo bonito que es el amor, normalmente las canciones románticas son muy tristes ¿no?
 
Se titula "Núria" y la comparto aquí porque este es el nombre que hemos escogido para nuestra segunda hija. Creo que los nombres son muy importantes, caracterizan mucho a la persona que lo lleva.
 
"Quiero gritar muy fuerte que mi mundo se llama Núria."

martes, 1 de febrero de 2011

20 semanas de embarazo


Hoy me han hecho la eco de las 20 semanas. Las que habéis pasado por ahí sabéis que es la más completa y la más bonita de las ecografías que te hacen en el embarazo. Ha habido un momento para mí mágico en el que se le han visto todos huesitos de la cara. Las fotos que nos han hecho no le hacen justicia. Os dejo la mejor, una foto del cráneo.

Han hecho todas las mediciones y han buscado los órganos internos, los pies y las manos, han comprobado que el labio no estuviera partido, y se ha puesto mi ginecólogo a intentar decirnos si es niño o niña. Lo ha intentado tres veces, y tenía las piernas cruzadas. Al final se ha visto claro, y vamos a tener una nueva chica en casa. Yo lo tenía claro, la verdad, que pensaba desde que me quedé embarazada que iba a ser niña.

Y no me enrollo más, ha sido una visita muy agradable, y es que tanto con el ginecólogo como con la enfermera me encuentro muy a gusto. Sobretodo porque el ginecólogo, una vez comprueba que lo importante va bien, se detiene a explicar lo que se ve en cada momento.

No voy a hacer la entrada muy larga porque me estaría días. Estoy en una nube de contenta, de saber que todo va como tiene que ir y de me hayan confirmado que voy a tener otra princesita en mis brazos.